Hola a tod@s:
Los recortes en Educación que ha puesto en marcha el Ministerio de Educación, añadidas a una reducción de presupuestos de un 26% respecto al 2011, se pretenden llevar a cabo mediante la implantación de medidas que van a afectar a nuestras hijas e hijos.
El resumen, que no es mío porque lo publica el propio Ministerio [podeis verlo aquí ] , es el siguiente:
– El horario mínimo de los profesores pasa a ser de 20 horas lectivas semanales. Esto quiere decir que el día menos pensado les pueden poner más horas ¿Cuándo pretenden que preparen las clases?¿Cuando van a tener tiempo para atender a las familias?¿Y para que se formen?
– Las bajas no se empiezan a cubrir hasta 10 días. Lo que va a pasar es que nuestras hijas e hijos se quedarán desantendidos, ya que con los cupos justos la cosa va a estar complicada para cubrir estos periodos. Esto ya pasa en nuestro instituto porque a los cursos 4º de ESO y 1º y 2º de bachillerato les avisan el día antes de que pueden llegar una hora más tarde o saldrán una hora antes cuando va a faltar algun profesor y no hay modo de cubrirlo.
– Podrá haber un 20% más de alumnos en clase (de 30 a 36 en E.S.O. y de 35 a 42 en Bachillerato) Dicen que no tendrá efecto sobre la calidad. Todos sabemos que tenemos clases con 25 que son problematicas y que salen adelante gracias al esfuerzo de los profesores ¿podrán hacer lo mismo con 42?
– Dejarán una sola especialidad de Bachillerato por Instituto: ¿Y si nuestras hijas o hijos no quieren hacer esa especialidad? Pues a cambiarse.
– Se «congela» la reforma de la FP que es, probablemente, una de las necesidades más acuciantes para cambiar eso que llaman el «modelo productivo».
– Cuando lleguen a la Universidad, ojalá lleguen bastantes, nos vamos a encontrar con unas tasas imposibles para sueldos medios. Dicen que pidamos créditos ¿que banco nos lo va a dar en la situación actual?¿lo vamos a poder devolver? En EEUU ya tienen una «burbuja educativa» a punto de estallar por los créditos educativos impagados.
– Las becas no se baremarán por renta sino por notas. Se becarán solo a los «mejores» expedientes académicos aunque no les haga falta el dinero. Las becas siempre han servido para que los que no tenían «posibles» pudiesen darle estudios a sus hijos. Se ha acabado. Uno de los efectos de la Escuela Pública que tenemos es el reequilibrio social que se ha producido desde los años 80 hasta ahora. Muchos de nosotros somos hijos de familias cuyos padres tenían los estudios primarios y nosotros hemos podido llegar a bachillerato e incluso a la Universidad. No va a seguir siendo así.
No es Economía, es Ideología.
En el Partido Popular, y lo dicen sus programas electorales y los documentos del gobierno, creen en el aprovechamiento de la Enseñanza como negocio. Por ello protegen a los empresarios.
Y la Escuela Pública, tal cual está, con sus fallos incluidos, es el impedimento para que, los que puedan, lleven a sus hijas e hijos a centros privados donde paguen por un servicio que, por ahora, es gratuito.
La Universidad Privada, por ejemplo, es un fracaso económico porque nadie paga por la misma formación científica si hay otra oferta mucho más barata y, todavía, con mucho más prestigio en la Universidad Pública. Y con las medidas aprobadas eso se acaba.
La Plataforma Estatal por la Escuela Pública, integrada por CEAPA, Sindicato de Estudiantes, FE-CCOO, FETE-UGT y STES-i, ha decidido convocar a alumnado, padres y madres, y profesorado, a una jornada de lucha a celebrar el jueves 10 de mayo en toda España. [Enlace]
En el estado de cosas actual, creo que los socios de la AMPA del IES Blas de Otero deberíamos apoyarla y, al menos, deberíamos tratar de asistir a la manifestación que se prevé para esa tarde.
Por otra parte, mis noticias son que el día 8 se reune la Asamblea de Interinos y que, a parte, la Plataforma Estatal por la Escuela Pública está estudiando convocar en la segunda quincena de mayo una nueva jornada de huelga.
Cuando sepa algo más os lo haré llegar.
El derecho que no se defiende, se pierde.
Un saludo,
Luis Castrillo Aguilera.
AMPA del IES Blas de Otero 